Y...coincidir

No cabe duda que los personajes del relato de este mes fueron un tanto extraños. He aquí lo que resultó:

Super Flash despertó en medio de una gran confusión e hizo la clásica pregunta:

- ¿Dónde estoy?-  su voz sonó extraña.

- Dirás, ¿dónde estamos?- dijo alguien a su lado.

- ¿Quién eres?, no te veo - el super  héroe se sentía bastante mareado. Haciendo un esfuerzo intentó incorporarse pero estaba bastante débil.

Todo era oscuridad. Se frotó los ojos y trató de visualizar algo, ¡nada, no vio absolutamente nada! 

Súbitamente, frente a él, aparecieron dos luces amarilla de forma oblonga y pensó que se trataba de una especie de lámpara. 

- Mi nombre es Neko Kurai  - Flash escuchó sorprendido, a la vez que se sintió un tanto aliviado al saber que tenía compañía, aunque le asustaba que la voz emanara de aquellos ojos amarillos.

- ¡Que nombre tan extraño!, ¿eres oriental?-  preguntó intrigado.

-  No precisamente, pero mi dueño sí, era japones -contestó con un tono bastante educado y cortés. 

-¿ Tu dueño?,¡no me digas que has sido esclavizado! - dijo un tanto indignado, pues él siempre había luchado por a libertad.

- ¡Uy no!, más bien "yo" lo tenía esclavizado a él - y dio una presuntuosa y elegante circunvalación.

Fue entonces que Super Flash se dio cuenta de que hablaba con un gato negro, muy negro.

- ¡Eres un gato!- exclamó incrédulo.

- Pues sí, eso parece-  afirmó calmadamente y comenzó a lamerse una pata.

"Debo estar volviéndome loco, yo, ¡hablando con un animal!", pensó angustiado.

- Pero...¿qué hacemos aquí, qué lugar es este?- 

- Al parecer se llama "oirotagrup" o al menos así dice en la entrada - le informó Neko.

- ¡Que nombre más raro!, en realidad no me dice nada .¡Ufff, me duele la cabeza! y... creo que tengo amnesia-  comenzó a masajearse las sienes con las yemas de los dedos.

- U...uun momento,¡ya recuerdo!: esta mañana me despertó el zumbido de mi super celular *. Era la llamada del jefe de bomberos de la Delegación Coyote. Me pedía ayuda. Dijo que ardía una fábrica de chocolates, que escaseaba el agua y que era casi imposible extinguir el fuego. 

Como siempre, sin dudar ni un instante, me levanté, me puse mi super traje de Super Flash y salí rápidamente ...

- ¿Sin ducharte, ni cepillarte los dientes?, ¡guácala! 

- Cuando subí a la azotea para levantar mi super  vuelo, recordé que el día anterior se había vencido mi super  licencia y que debido a esto no podía utilizar ese medio de transporte, so pena de que me retiraran definitivamente mi super  permiso. Así que, resignado, bajé y consulté la dirección de la fábrica de chocolates en mi super navegador.

- Si vuelves a decir "super", ¡vomito!- le advirtió el gato.

- Recuerdo que llegué a la esquina de Rondana y Tuerca, y ahí me pasó algo muy malo, pero...¿qué fue, qué fue? - se pegó en la frente tratando de recordar - Después todo se hizo confuso. Estaba sólo  a una cuadra de la fábrica y... al atravesar la calle vi venir un vehículo pesado- en su cara se dibujó un gesto de horror - ¡ay no, me atropelló un camión!, eso quiere decir que...-

-  Sí, estás muerto, bueno, "estamos" muertos - dijo, guiñando un ojo.

- No, no puede ser, yo, Super Flash, !muerto!- y se echó a llorar amargamente.

Neko comenzó a dar arqueadas.

- ¡Te dije que no repitieras esa asquerosa palabra!

Super Flash logró levantarse del piso donde había estado tirado y trató de alejarse del gato. Caminó deteniéndose de la pared. Aquel lugar parecía una cueva.

- ¡Escaparé, mis su...poderes, me librarán de este encierro !- y continuó tambaleante rumbo a la salida.

- No hagas tonterías, yo ya lo intenté y es imposible. Con poderes o sin ellos, sencillamente no se puede salir - ya repuesto del asco, comenzó a afilar sus uñas tallándolas sobre una piedra.

Super Flash finalmente llegó a la entrada y trató de cruzar el umbral. Pero no lo logró. Al intentar trasponer el dintel, una extraña fuerza lo regresó haciéndolo caer sentado sobre el piso.

Nuevamente se incorporó y alcanzó la gran puerta transparente, tomó la manija en forma de media luna y trató de impulsarse para salir. El portón de doble hoja actuó como un resorte aventándolo varios metros hacía atrás. 

Sentado en el suelo vio que se abría y cerraba la hoja que lo había repelido... entonces notó algo:

- ¡Ahí dice "Purgatorio", no oriotagruP!- exclamó mientras señalaba con su tembloroso dedo índice.

- ¡Cáspita Flash, estamos en el Purgatorio y ve tú a saber por cuanto tiempo!- el gato movió la cabeza pesaroso.

-¡Ahhhhh, ya recordé lo que me pasó hoy por la mañana al llegar a la esquina de Rondana y Tuerca!- y dirigió una encolerizada mirada hacia el animal -¡ tú te me travesaste, maldito gato, me diste mala suerte y por eso me atropelló el camión !-  comenzó a perseguir a Neko.

- ¡Cálmate, cálmate, no seas supersticioso!- dijo mientras corrían en círculos por toda la cueva - Además, tú también me diste mala suerte, por ir viendo el accidente caí en una fosa séptica y no me pude salvar, pues ya había gastado mis siete vidas -

 Flash se detuvo resoplando y comenzó a reír.

- Jajajajajaja, ¡que bien lo pagaste! Pues fíjate que yo no soy como tu antiguo dueño, desde hoy seré tu amo y ¡ tú serás mi esclavo!

- Ya veremos, ¡miauuu!- y tomándolo por sorpresa, comenzó a restregarse entre las piernas del super-héroe y a ronronear suavemente.

DK

(*teléfono móvil)